LIBROS DE MÚSICA CLÁSICA. Los cuentos me apasionan desde antes de nacer. Una aseveración atrevida y sin embargo real. Mi madre durante nuestro embarazo me contaba cuentos a modo de entrenamiento de lo que después, una vez nacido, se convirtió en una maravillosa costumbre largamente mantenida. De tal manera que en algún lugar de mi cerebro atesoro esos cuentos prenatales que me acompañan desde entonces.
Lo mismo puedo decir de la música. Hago propio el comentario de Eugenio Trias en su obra La imaginación sonora cuando dice: “En la vida intrauterina se alumbra, con la percepción del sonido, quizás el filtro de la voz materna transformado en un juego de formas protomusicales". Y con ello deduzco que en realidad mi madre me contaba cuentos musicales. Cuento y música en íntima e inseparable conjunción, escuchados en la más preciada de las salas de conciertos: el seno maternal.
Sirva este preámbulo porque acaba de caer en mis manos un breve cuento, que después deviene en novela, de la escritora barcelonesa María José Voltes que de alguna manera, probablemente de forma inconsciente, me ha hecho reparar en mis querencias musicales y literarias prenatales. Un precioso cuento-novela que aúna, como entonces, el cuento y la música. Su título:”Los cisnes no tiene alma, los violines sí”.
Esa metamorfosis de cuento a novela en este libro me hizo pensar que tal vez mi vida incluye esa misma estructura del cambio y por ello quiero encontar esa frontera en la cual los cuentos de mi madre se transformaron en la novela de mi vida. Confieso que sigo buscándola.
Así comienza este cuento de María José Voltes:
“Erase una vez una coneja preciosa…”
Dejo para vosotros que descubráis el resto.
Manuel López-Benito
FICHA DEL LIBRO
Título: Los cisnes no tienen alma, los violines sí
Autora: María José Voltes
Editorial: Finis Terrae_Ediciones
Año: 2014
Páginas: 223
ISBN: 978-84-942091-1-6
De las muchas obras musicales que se citan en este cuento-novela, he elegido para invitaros a escuchar el interludio de la Cavalleria Rusticana de Pietro Mascagni, al tiempo que aprovecho para recomendaros la lectura de aquél.
Mascagni: Cavalleria rusticana. Intermezzo