Clásica 2

MÚSICA CLÁSICA PARA COCINAR. Las sopas frías copan las cartas de los restaurantes de lujo en las fechas veraniegas dando un toque de distinción a las mismas y escapando del socorrido gazpacho, la sopa fría por antonomasia. Llenas de color, “entran por los ojos” y refrescan los gaznates resecos después de una larga mañana de playa. Con sus sabores frescos, la facilidad de su preparación y su precio, perfectamente adaptado a la crisis, hacen de las sopas frías un recurso muy socorrido. Por todo ello os presento hoy una magnifica representante de todo lo dicho anteriormente: Crema fría de calabacines al curry con tropezones.

MÚSICA CLÁSICA PARA COCINAR. Se acerca el verano. Atrás quedaron los frios días del invierno. Llega la hora de guardar la ropa de abrigo y concentrarse para superar la llamada operación biquini. Una fórmula recomendable es cocinar de manera divertida platos que nos ayuden a no tener que sufrir con las aburrridas y tristes recetas de régimen.

MÚSICA CLÁSICA PARA COCINAR. Bienvenidos a un nuevo capítulo de Música Clásica y Gourmet. Hoy quiero presentaros una receta sencillísima pero muy agradecida y nutritiva: “Anguilas a la Cova da Barxa” Veamos:

MÚSICA CLÁSICA GOURMET. El fascinante mundo de las salsas constituye una de las más preciadas herramientas para hacer un plato delicioso y, por ende, hacer felices a nuestros invitados. Modestos ingredientes, bien elegidos, cocinados con cariño y aderezados por una de estas maravillosas salsas pueden llegar a alcanzar las más altas cotas del placer. 

La Música Clásica incita a los maridajes gastronómicos y vitivinícolas. En nuestro viaje a través de los vinos recomendables para acompañar a la audición de una buena música clásica entre amigos, hacemos un alto hoy en Villafranca de Duero, Valladolid, y en  la D. O. Rueda, para conocer lo que el paso por barricas de roble puede hacer con la variedad verdejo

MÚSICA CLÁSICA PARA COCINAR. Agosto está ya más que mediado y con ello está finalizando el veraneo de gran parte de vosotros. Las editoriales se preparan para publicitar sus nuevos coleccionables; las televisiones y las radios ultiman sus nuevas parrillas de programación; los grandes almacenes nos amenazan con la “vuelta al cole” y, como todos los años, el personal se propone estudiar inglés y matricularse en un gimnasio para quemar las grasas acumuladas por el “dolce far niente” veraniego.

MÚSICA CLÁSICA PARA COCINAR. Las calurosas noches de estío invitan a sentarse al aire libre en compañía de unos amigos y charlar sosegadamente después de cenar. A veces ocurre que la compañía es tan agradable y la conversación tan amena que puede llegar a amanecer sin que la reunión haya terminado. Ver el sol levantándose poco a poco con esa luz especial, que solo se da en tales momento,  puede ser un broche de oro a la larga velada. Un placer.

MÚSICA CLÁSICA PARA COCINAR. Estamos en tiempo de Adviento. Las madres, las abuelas y algún que otro padre y algún que otro hijo, entre los que me encuentro, estamos pensando ya en la cena de Nochebuena.  Una cena donde nos la jugamos. Por  eso es muy importante tener a mano alguna receta de fácil preparación, apetecible y algo diferente del socorrido pavo, del besugo al horno, o del marisco, que todo sea dicho, a los gallegos no nos cuesta cocerlo bien pero que no resulta tan fácil allende el Padornelo

Esta sección de Música Clásica Gourmet os propone hoy un descubrimiento que quiero poner en vuestro conocimiento. Al hilo de lo ya comentado con respecto a la música clásica, este tipo de hallazgos son muy emocionantes.  Se trata del primer Brut Nature elaborado con vino de Albariño que he probado