DISCOS DE MÚSICA CLÁSICA. Clasica2 se complace en presentaros en nuestra sección de discografía recomendada "In Paradiso", el nuevo trabajo de Raquel Andueza y Jesús Fernández Baena publicado en Anima e Corpo.
Tarquino Merula: Canzonetta spirituale sopra alla Nanna
Hor ch’è tempo di dormire
dormi figlio e non vagire
perche tempo ancor verrà
che vagir bisognerà.
Deh, ben mio, deh, cor moi, fà
Fa la ninna ninna na.
Chiudi quei lumi divini
come fan gl’altri bambini
perche tosto oscuro velo
priverà di lume il cielo.
Deh, ben mio, deh, cor moi, fà
fa la ninna ninna na.
Ovver prendi questo latte
dalle mie mammelle intatte
perche ministro crudele
Ti prepara aceto e fiele.
Deh, ben mio, deh, cor moi, fà
fa la ninna ninna na.
Amor mio sia questo petto
hor per te morbido letto
pria che rendi ad alta voce
l’alma al Padre sù la crocce.
Possa hor queste membra Belle
vezzonette e tenerelle
perchè puoir ferri e catene
gli daran acerbe pene.
Deh, ben mio, deh, cor moi, fà
fa la ninna ninna na.
Queste mani e questi Pieri
ch’hor con gusto e gaudio vedi
ahime com’in varii modi
passaran acuti chiodi.
Questa facia gratiosa
rubicunda hor più che rosa
sputi e schiaffi sporcheranno
con tormento e grand’affano.
Ah con quanto tuo dolore
sola speme del mio core
questo capo e questi crini
passeran acuti spini.
Ah ch’in questo divin petto
amor mio dolce e dilecto
vi farà pianga mortale
empia lancia e disleale.
Dormi dunque figliol mio,
dormi pur Redentor mio,
perchè poi con lieto viso
ci vedrem in Paradiso
Hor che dorme la mia vita
del mio cor gioia compita
tacia ogn’un con puro zelo
tacian sin la terra e’l Cielo.
E frà tanto io che farò?
il mio ben contemplerò?
Ne starò col capo chino
fin che dorme il moi Bambino.
|
Es ya la hora de dormir;
duerme, hijo, y no llores,
porque llegará el momento
en que tengas que llorar.
Toma, mi amor, toma mi corazón,
haz lo que digo, canta esta nana.
Cierra esos ojos divinos
como hacen los otros niños,
porque pronto un oscuro velo
apartará la luz del cielo.
Toma, mi amor, toma mi corazón,
haz lo que digo, canta esta nana.
O toma esta leche
de mis pechos puros,
porque un ministro cruel
te trae amargura y miel.
Toma, mi amor, toma mi corazón,
haz lo que digo, canta esta nana.
Que este pecho sea
blando lecho para ti, mi amor,
antes de que grites
y entregues tu alma a nuestro
Padre en la cruz.
Descansa tus hermosos miembros,
tan preciados y tiernos,
porque hierros y cadenas
pronto los azotarán.
Toma, mi amor, toma mi corazón,
haz lo que digo, canta esta nana.
Estas manos y estos pies,
tan hermosos y amables de ver,
¡ay!, serán de muchas formas
lacerados por afilados clavos.
Este rostro hermoso,
más rosado que una rosa,
recibirá escupitajos y golpes
con dolor y tormento.
Oh, con qué pesar,
única esperanza de mi corazón,
esta cabeza y estos cabellos
serán lacerados por afiladas espinas.
Oh, este pecho divino,
mi dulce y querido amor,
será herido de muerte
por una lanza cruel y traidora.
Duerme, pues, hijo mío,
duerme, mi Salvador,
porque con rostro feliz
nos reuniremos en el Paraiso.
Ahora duerme, mi vida,
alegría inmensa de mi corazón,
que reine el silencio y te vigile,
que hasta la tierra y el cielo callen.
¿Y qué haré mientras espero?
Contemplaré a mi amor
e inclinaré la cabeza
hasta que mi Hijo duerma.
|
No te pierdas nuestros PODCAST DE MÚSICA CLÁSICA EN SPOTIFY
No te pierdas nuestros VIDEOS DE MÚSICA CLASICA EN YOUTUBE