LA ÓPERA EN CLASICA2. En el capítulo anterior de la Historia de la Ópera con Audiciones Musicales habíamos dejado a nuestro cantor tracio entrando en el Hades tras haber burlado a Caronte y haber cruzado la Laguna Estigia. Continuemos, pues con nuestro relato:
Escuchemos a continuación este emocionante momento de la ópera de Claudio Monteverdi.
Monteverdi: Orfeo. Ahi, vista troppo dolce VER MINUTO (30:28)
EURIDICE
Ahi, vista troppo dolce
e troppo amara;
Così per troppo amor
dunque mi perdi ?
Et io misera perdo
il poter più godere
e di luce e di vita,
e perdo insieme
tè d' ogni ben mio
più caro,
ò mio consorte.
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EURÍDICE
Ay, qué visión tan dulce
y tan amarga;
¿Así que me has perdido
por exceso de amor?
Y yo, mísera, pierdo
la capacidad de volver a gozar
de la luz y de la vida,
y al mismo tiempo
te pierdo también a ti, a ti,
mi bien más querido
y mi esposo.
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Monteverdi: Orfeo. Dove ten vai, mia vita? VER MINUTO (31:50)
ORFEO
Dove ten vai, mia vita?
Ecco i' ti seguo.
Ma chi me 'l niega, ohimè:
sogno o vaneggio?
Qual poter,
qual furor da questi orrori,
da questi amati orrori
mal mio grado mi tragge,
e mi conduce a l' odiosa luce?
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ORFEO
¿Te vas, vida mía?
Yo estoy aquí y te sigo,
pero, ¿qué me lo impide, ay?
¿Es un sueño o un espejo?
¿Qué fuerza oculta
me arrastra a la fuerza
lejos de estos horrores,
de estos horrores queridos.
Y me conduce hacia la luz odiada?
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